Después de la muerte de su hija (Lilian Blankenship) y de su esposa (Cristina Sefarini), un cínico (Antonio Banderas) abogado, defensor de los criminales y miembro del sistema penal fallido de los Estados Unidos, hace un voto de silencio preparándose para hacer justicia por su propia mano y obtener su venganza. Luego de tener un estilo de vida decadente, inmerso en el alcohol y las peleas clandestinas donde no busca sino expurgar su culpa a través del dolor, encuentra la armonía necesaria en el silencio y la disciplina para desenredar el misterio que rodea a la muerte de sus seres queridos, entrenar su cuerpo y transformarse en la única persona capaz de restituir el orden. Sin embargo, conforme se acerca a la respuesta, descubre que él también es, a su vez, un perseguido y que detrás de sí lo acecha peligrosamente su peor enemigo: el pasado.

Actos de venganza (Acts of Vengance, 2017) es una película de acción que busca representar lo sórdido de las emociones a partir de la violencia física: el dolor enloquece y redime. Además, es el nacimiento trágico de un héroe arquetípico que, sin embargo, no realiza ninguna acción heroica, sino que mata sin saber exactamente si por culpa o por amor. Dividido en capítulos, el filme de Isaac Florentine (Undisputed II, 2006) pretende ser reflexivo al retomar la filosofía estoica de Marco Aurelio, misma que inspira al personaje a cambiar su modo de vida y a buscar uno con motivaciones más profundas. No obstante, más que reflexionar, justifica, irónicamente, la brutalidad emocional de Frank Valera, protagonista de la película, con una corriente cuyas meditaciones abogan por la indiferencia y la inmovilidad. El personaje de Antonio Banderas se perfilaba, en un inicio, a revivir a aquél que interpretara en la película de Robert Rodríguez, Desperado (1995), pero en el avanzar de la trama decae en lo ridículo, lo bochornoso y tedioso: el silencio que guarda desde la mitad del filme cansa y pierde su sentido. Cada vez estamos más acostumbrados a ver películas en las que un hombre cínico y capitalista se transforma en un “buen” ser humano (¿por qué?). Sin embargo, sería muy sencillo desacreditar a Florentine por resguardarse en el éxito de las ideas que forjan al género de acción, de manera que, juzgándola desde ahí, desde su género, la cinta cumple con lo esperado.

Fecha de estreno: 8 de diciembre,2017.

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