CORTO. Aquí puedes ver 'Padre e hija' de Michael Dudok de Wit
Durante una fuerte tormenta, un hombre es arrojado fuera de su barco. Después de la tempestad, el hombre se despierta en una playa. Al explorar el territorio, se percata que se encuentra en una isla cubierta de exuberante vegetación tropical. Él es el único ser humano en la isla que parece estar habitada exclusivamente por pequeñas criaturas amistosas como cangrejos, insectos y aves. Aunque la naturaleza le puede brindar lo mínimo necesario para sobrevivir, el hombre está dispuesto a escapar. Inmediatamente construye una balsa de cañas y ramas de árboles, pero no muy lejos de la orilla, una misteriosa criatura marina destruye su embarcación y se ve obligado a regresar a la isla. Obstinadamente, el hombre intenta la huida, siempre sin éxito, hasta que la criatura que le impide salir de la isla se revela: es una gran tortuga de color rojo que lo pone a prueba al despertar sus más salvajes deseos de ira, desesperación y violencia.
Era el año 2001 cuando el realizador holandés, Michael Dudok de Wit, ganó el Oscar al mejor cortometraje de animación por su trabajo en Father and Daughter; al ver el conmovedor relato, Toshio Suzuki, de Studio Ghibli, lo contactó para trabajar en conjunto. Años más tarde, y luego de superar algunas trabas, Dudok de Wit se convirtió en el primer europeo en colaborar con el prestigioso estudio japonés al materializar su propio guión en una bella obra de la animación contemporánea sobre la simbiosis del hombre y la naturaleza. La tortuga roja (La tortue rouge, 2016) es una película sobre la vida entendida como un lento aprendizaje, aceptando sus ciclos llenos de esperanzas, desastres y milagros, de separaciones y encuentros. El relato está suspendido en el tiempo-espacio; es difícil situar la acción en una época y región geográfica específica. No hay diálogos, únicamente los sonidos de la naturaleza y una partitura orquestal intensa que configuran una experiencia sensorial repleta de significados, emociones y lecciones sobre la esencia de la existencia. El estilo de la animación sigue la línea de la gran tradición europea de dibujos animados; los rasgos de los personajes recuerdan las novelas gráficas del belga Hergé y el francés Jean Giraud, pero la filosofía japonesa –respecto a la presencia inevitable de la naturaleza y la manera en que ésta afecta la vida, los sueños y los deseos del personaje principal– se siente con gran fuerza en la historia. Atemporal y universal, lo que comienza como un cuento de naufragio, aislamiento y desamparo sufre una metamorfosis mágica y muestra el retrato de un espíritu infatigable y su estrecha relación de bondad con la naturaleza para, finalmente, desembocar en una mítica historia de amor, una meditación sobre la reencarnación, el renacimiento y la creación.
Fecha de estreno en México: 16 de junio, 2017.
Consulta horarios en: Cinemex, Cineteca Nacional