Si bien Mills ha confesado que la relación con su hijo sopló la inspiración central para el filme, también incidió en su construcción Alicia en las ciudades de Wim Wenders.
Cuarón construye un breve relato sobre el bullying, en El sándwich de Mariana, una pieza en la que plantea los avatares diarios de Mariana (Paola Ruiz), una niña de diez años, maltratada constantemente por Isabel (Anna Gaby), 3 años mayor que ella.
Se emplean las líneas de los decorados, la multiplicación de las escenografías y la aglomeración de las formas para crear una imagen desproporcionada y construir un espacio espectral y claustrofóbico.