Película: La ballena - ENFILME.COM
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FICHA TÉCNICA
The Whale
La ballena
 
Estados Unidos
2022
 
Director:
Darren Aronofsky
 
Con:
Brendan Fraser, Samantha Morton, Sadie Sink, Hong Chau, Ty Simpkin
 
Guión:
Samuel D. Hunter
 
Fotografía:
Matthew Libatique
 
Edición:
Andrew Weisblum
 
Música
Rob Simonsen
 
Duración:
117 min.
 

 
La ballena
Publicado el 10 - Feb - 2023
 
 
La náusea y el coma diabético provocados por el desconcierto y la sobredosis de azúcar terminan por sepultar la crisis depresiva y existencial de un buen tipo, tremendamente atormentado. - ENFILME.COM
 
 
 
por Alfonso Flores-Durón y Martínez

Los alumnos de un curso en línea (de los que se normalizaron durante la pandemia) no pueden ver, aunque se lo solicitan, la figura de su profesor; el cuadro aparece en negro. Él argumenta que la cámara de su computadora no funciona. La verdad es que Charlie (Brendan Fraser), como seguramente ya todos los que leen esto lo saben, sufre de obesidad mórbida; bueno, en realidad ya ha rebasado ese nivel como por 100 kilos, aprox.  Y esto, irónicamente, por seguir una dieta balanceada: en grasas, harinas, azúcares, en todo; todo en exceso, sin discriminar. Cuando un intruso toca a la puerta de su apartamento y entra intempestivamente, descubre a Charlie haciendo la proeza de masturbarse viendo porno gay, a partir del hallazgo de encontrarse el dispositivo corporal necesario para tal faena debajo de las copiosas capas sobre capas de piel que han dejado enterradas algunas partes (muy necesarias, sobre todo para tal efecto) del cuerpo. El esfuerzo inhumano deja a Charlie al borde del infarto, literalmente.

El chico, Thomas (Ty Simpkin), que de alguna forma le salva la vida, dice ser representante de “La luz del mundo”, una de esas sectas evangelistas que apuestan al inminente fin de la existencia, y ve en Charlie una enorme presa con, entre otras muchas cosas (como arterias, válvulas, etc.), el alma averiada en urgencia de purificación. Pero Liz (Hong Chau), única amiga y custodia de Charlie, no piensa lo mismo; su propio hermano sufrió enormidades debido a la feroz exigencia de su padre por llevar una vida lo suficientemente recta como para alcanzar uno de los pocos pasaportes al paraíso que, defiende la secta, habrá en juego en el juicio final. El haber sido homosexual no le ayudaba mucho, precisamente, y su vida no terminó de manera particularmente sagrada. Tampoco a Liz le agrada que de pronto, por la casa de su amigo, haya aparecido Ellie (Sadie Sink), la hija de dieciocho años de Charlie a quien no veía desde hace diez, porque desde luego le puede alterar las pulsaciones y, también es muy probable, el espíritu. Pero pese a que Ellie es una chica bastante agresiva y rebelde, además de guardar un rugiente resentimiento a su padre (por haberlas abandonado, a ella y a su madre, al conquistar el amor de un alumno, el hermano de Liz), el reconectar con su hija le suministra oxígeno a su castigado organismo y su debilitado ánimo. Sin embargo, ¿será ya demasiado tarde para revertir el daño, a su cuerpo, a su alma, a su hija y la relación con ella? Quizá en alguna recóndita, cándida interpretación del célebre libro de Herman Melville (Moby-Dick), que además funge como manifiesta metáfora (no sólo física) de Charlie, se encuentre la respuesta.  

En primera instancia, basados en las características de la obra, es probable que Darren Aronofsky no aparezca como primera opción al pensar en el director de The Whale. Se trata de la adaptación escrita por Samuel D Hunter a su propia obra de teatro, por lo que el primer desafío era dotarla de carácter cinematográfico (pese a desplegarse casi todo en los asfixiantes confines de un pequeño apartamento, que puede olerse a través de la pantalla) y, simultáneamente, evitar que la intensidad de la dramaturgia se, eh, desinflara. Y, claro, rascándole un poco empiezan a desgranarse  algunos de los sellos del cine de Aronofsky, como son la exploración de mentes atormentadas (por el peso del pasado o la densidad del presente), asfixiadas por la culpa; retratadas de un modo envolvente, que parece dejar poca escapatoria incluso para el aire que respiran los protagonistas, unos afanosamente buscando, de una u otra forma, la ansiada redención. Pero pese a que The Whale cuenta con una estructura ósea sólida, con un guion  bien aceitado, interpretado de modo notable por un ensamble actoral por supuesto liderado por un Brendan Fraser físicamente irreconocible (que exuda sentimiento y dignidad), apuntalado por la siempre magnífica Samantha Morton (pese a lo breve de su aporte, con todo y acento redneck), Aronofsky desconfía de las capacidades de entendimiento y empatía de su público y cree necesario recargarse con afán en un score irritantemente lacrimógeno, además de recurrir a todo tipo de artilugios para amplificar la tendencia de por sí azucarada a la hipersensibilización que tiene el material original. El drama del padre que es un buen hombre, de voz suave, sabiduría poética y compasiva, en misión autodestructiva queriendo recuperar el cariño de su hija era ya de por sí poderoso, capaz de enganchar a cualquiera. Pero en Hollywood mover sensibilidades, piensan, cualquiera lo logra, ellos lo que buscan es exprimir la sensiblería de personas a las que les encanta ser manipuladas y, claro, de paso, ganar quizá premios Oscar al aprovecharse de la que también les sobra a los miembros de la Academia. El resultado es el confuso retrato de un hombre que, por la forma en ser mostrado (a partir de ángulos de cámara que acentúan su deformación física, en un ambiente apenas iluminado), lo usa Aronofsky para provocar lástima o burla. La intención, quizá, era que como público lo viéramos como él se ve a sí mismo (a través del espejo, y de la culpa): monstruoso. La náusea y el coma diabético provocados por el desconcierto y la sobredosis de azúcar terminan sepultando la validez de la crisis depresiva y existencial de un buen tipo, tremendamente atormentado, en búsqueda de rescatar lo que, después de todo, queda claro que sí le era muy preciado.

@SirPonFDyM

Consulta los horarios en: CinépolisCinemex, Cineteca Nacional 

 
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