No existen muchas estrellas del tamaño de Tom Cruise. A lo largo de cuatro décadas de súperfama, ha sostenido un empuje gravitacional que lo hace estar más allá del bien y del mal. Su carisma en pantalla; esa sonrisa centelleante -los espectadores quedan tan indefensos ante ellas hoy en día como lo estaban cuando Cruise se hizo de un nombre a principios de los ochenta.
Introducido a las audiencias con roles menores en las películas medianas Endless Love y Taps (ambas de 1981), rápidamente se convirtió en uno de los actores más cotizados, trabajando con directores del calibre de Martin Scorsese, Brian De Palma, Stanley Kubrick, Steven Spielberg, Michael Mann y Paul Thomas Anderson, entre muchos otros.
Fue protagonizando como presuntuoso romántico que su imagen de estrella se forjó inicialmente, y esa persona ha simultáneamente cementado y complicado su carrera entre películas de acción y proyectos de autor, igualmente. Perennemente reservado sobre las viscicitudes de su vida privada, Cruise ha sacado provecho de la fascinación de sus fans con su elusiva personalidad para astutamente atraer atención a sus proyectos, colocándose a sí mismo casi como una entidad mítica. Para muchos, él representa la última gran estrella de cine existente.
Coincidiendo con el estreno de Top Gun: Maverick – la secuela de uno de sus primeros éxitos, Top Gun (1986), el British Film Institute se dio a la tarea de rescatar 10 de sus más relevantes interpretaciones.
(En el link de la parte inferior de la nota, pueden revisar lo que la gente del BFI escribió sobre cada una de las participaciones actorales de Cruise.
Risky Business (1983)
Director: Paul Brickman
Director: Tony Scott
The Color of Money (1986)
Director: Martin Scorsese
Director: Rob Reiner
Director: Brian De Palma
Director: Stanley Kubrick
Director: Paul Thomas Anderson
Director: Steven Spielberg
Director: Michael Mann
Director: Doug Liman
Trad. EF
Fuente: BFI