Claro que uno, como espectador, puede aproximarse al panorama general de los beatniks viendo la película The Beat Generation, pero ¿por qué conformarse con la estilización y el alto brillo del filme de la Metro-Goldwyn-Mayer cuando se puede tener acceso a Pull My Daisy, un fragmento de la realidad sin ser alterado con trucos visuales y refinados tratamientos?
Ambas películas fueron realizadas en 1959, pero sólo la segunda proviene de la lente del fotógrafo Robert Frank, autor del famoso e importante libro de fotografía The Americans. Además, Pull My Daisy cuenta con las inusuales actuaciones de Allen Ginsberg, David Amram, Delphine Seyrig y Jack Kerouac. Este último, escritor de On the Road, proporciona toda la narración del filme y nos asegura que estamos viendo una película completamente comprometida con la mentalidad de la generación beat. Las palabras de Kerouac parecen, en un principio, un elemento de improvisación. Sin embargo, aunque la espontaneidad jugó un papel muy importante durante la realización del filme, Frank y compañía le dedicaron tiempo a la escritura de las situaciones, acciones y diálogos, así como lo reveló Alfred Leslie en 1968: “las escenas se basaban en un guión tan ensayado como cualquier otra película de Hollywood”.
Inspirado en un incidente en la vida de Neal Cassady y su esposa Carolyn, Pull My Daisy cuenta la historia de un guardafrenos ferroviario cuya esposa, una pintora, invita a un respetable obispo a cenar en su apartamento. A la reunión también llegan los provocadores beatniks que causan incomodidad en el obispo que lo único que desea es pasar una noche tranquila y civilizada.
La película sigue siendo un documento supremo sobre la energía y el apogeo de la generación beat.
LFG (@luisfer_crimi)
Fuente: Open Culture