Aquí puedes consultar la lista de Dargis y Scott

Richard Brody comenzó a escribir para The New Yorker en 1999, y ha contribuido a con artículos sobre directores como Francois Truffaut, Jean-Luc Godard y Samuel Fuller. Desde 2005, se ha encargado de editar las listas de películas de la célebre revista norteamericana. Escribe reseñas inteligentes y atinadas, una columna sobre DVDs y un blog sobre películas titulado ‘The Front Row’. Es el autor del libro ‘Everything is cinema: The Working Life of Jean-Luc Godard,’ y actualmente trabaja en un libro sobre la Nueva Ola Francesa.

Brody acaba de publicar su lista de 25 películas favoritas de este siglo, y escribe lo siguiente en el más reciente número de The New Yorker:

Lo mejor de las listas es que inspiran otras listas. Hacen que los lectores se detengan a pensar en sus propias prioridades, preferencias y sobre todo en sus placeres. La lista que Manohla Dargis y A. O. Scott presentaron el otro día en New York Times: ‘Las Mejores Películas del s. XXI hasta ahora’, me puso a trabajar. Su decisión de publicarla ahora, en 2017, y no en un año que sea múltiplo de 5 o de 10, tiene un tono amable y hasta poéticamente arbitrario, pero también refleja el azaroso orden en el cual los hábitos de las personas (o por lo menos de los críticos) tienden a caer.

En solitario, una lista es trivial, pero en el contexto de una discusión en desarrollo (y es que gracias a Twitter, los críticos tienen el privilegio de comprometerse en una discusión con sus lectores), una imagen, una foto instantánea, o un sereno intercambio de respuestas, son el testimonio de la fuerza emocional de un grupo de críticos de cine que informan a los lectores sobre ciertas películas que vale la pena ver, revisitar y recordar.

Lo que se hace llamar una lista de ‘las mejores películas’ aquí, en realidad es una ofrenda de mis películas favoritas; son películas que he visto una y otra vez, y otras que estoy impaciente por repetir. Al elaborar esta lista, pude notar que el trabajo de algunos de mis cineastas favoritos se quedó fuera. (Algunos nombres: Chantal Akerman, James Gray, Robert Greene, Terrence Malick, Joe Swanberg, Frederick Wiseman.) Me pregunté por qué, y tal como el delegado sindical lo canta en Juego de Pijamas (1957), lo descubrí: algunos cineastas pueden representarse mejor no con un solo filme sino con su historial completo de trabajo. Así, el poder de la totalidad, es la cumbre del arte que sobrepasa el efecto de un solo filme. Si esta fuera una lista de mis cineastas favoritos de este siglo, sería una muy diferente. Pero las exclusiones son dolorosas, porque la idea no es establecer competencias o barreras, sino compartir placeres. (Por eso no decido por adelantado cuantas películas poner en las listas de fin de año, que más bien aparecen según las dicta el impulso.) Además aquellas penosas omisiones siguen dando vueltas en la cabeza una vez que las listas salen a la luz. Todas las listas son, desgraciadamente, inadecuadas… lo cual es afortunado, puesto que de otro modo, se estancarían en una simple actividad crítica.

Algo que también noté, es el alto porcentaje de filmes norteamericanos aquí. Por supuesto: vivo en EEUU y veo un mayor porcentaje de filmes locales que de algún otro lado. Pero creo que hay una historia incorporada al resultado: Hollywood en su modus operandi clásico (es decir, en el de las grandes producciones de los estudios) probablemente está en las garras de la obsesión por las producciones con obscenos presupuestos, pero el asenso de los financiamientos independientes ha liberado de muchas restricciones a ciertos directores que solían trabajar en el sistema, a la vez que los cineastas independientes que han comenzado desde cero, pagando ellos mismos sus producciones o financiándolas por fuera de la esfera de la industria, han liberado al arte. (Aquí es donde mi lista se vuelve arbitraria, puesto que de buena gana pude haber llenado la mitad con filmes de cineastas independientes, que no son mencionados en esta versión).

Por supuesto, mi lista es diferente a la de Dargis y Scott. Así es como debe ser: uno lee a diferentes críticos en busca de diferentes perspectivas y gustos. Mi desacuerdo con su listado radica en el hecho de que la hicieron entre los dos: su lista es producto de la negociación y el compromiso. Como lector de Daris y Scott, me gustaría ver sus listas individuales; y es con ese espíritu, con el que ofrezco la mía:

1. Elogio del amor, de Jean-Luc Godard, 2001

2. El Lobo de Wall Street, de Martin Scorsese, 2013

3. El Futuro, de Miranda July, 2011

4. Thou Wast Mild and Lovely, de Josephine Decker, 2014

5. Como alguien enamorado, de Abbas Kiarostami, 2012

6. El Último de los Injustos, de Claude Lanzmann, 2013

7. Los Motores Sagrados, de Leos Carax, 2012

8. Viaje a Darjeeling, de Wes Anderson, 2007

9. Las Playas de Agnès, Agnès Varda, 2008

10. El Mundo, de Jia Zhangke, 2004

11. Historia de una Pasión, de Terence Davis, 2016

12. Margaret, de Kenneth Lonergan, 2011

13. En Algún Lugar del Corazón, de Sofia Coppola, 2010

14. Frownland, de Ronald Bronstein, 2007

15. Chi-Raq, de Spike Lee, 2015

16. Little Sister, de Zach Clarck, 2016

17. Mooladé, de Ousmane Sembene, 2004

18. Hazme reír, Judd Apatow, 2009

19. Gentlemen Broncos, de Jared Hess, 2009

20. Coma, de Sarah Fattahi, 2016

21. El Francotirador, de Clint Eastwood, 2014

22. La Mujer en la Playa, de Hong Sang-Soo, 2006

23. El Pequeño Quinquin, de Bruno Dumont, 2014

24. Viktoria, de Maya Vitkova, 2014

25. Hamilton, de Matthew Porterfield, 2006

[Trad. Viera Khovliáguina]

Fuente. NewYorker