Max (Jean-Pierre Bacri) es un planificador de bodas que tiene la tarea de organizar un nuevo evento en el jardín de un castillo del siglo XVII. Él debe tolerar las exigencias de Pierre (Benjamin Lavernhe), el novio pretencioso, que quiere regalarle una fiesta hermosa e inolvidable a su futura esposa, la noble y tierna Héléna (Judith Chemla). Sin embargo, su exasperante cliente no es el único problema que lo mantiene con dolores de cabeza durante el evento; Max debe enfrentar la inminente ruptura de su matrimonio, soportar los reclamos -justificados- de su amante, satisfacer a los invitados exigentes y lidiar con la lealtad e incompetencia de su equipo (asistentes, meseros, cocineros, lavaplatos, músicos, fotógrafos). Todas estas preocupaciones se acumulan y toda la planeación de la boda debe sufrir modificaciones sobre la marcha con la intención de evitar el fracaso.
Olivier Nakache y Eric Toledano -guionistas y directores de Intouchables (2011) y Samba (2014)- diseñan una ágil comedia de enredos a partir de todos los artefactos que conlleva una recepción nupcial. Los directores despliegan una amplia cantidad de recursos cómicos -desde el más fino sarcasmo hasta el gag más simplón, pasando por la sátira mordaz o el retrato caricaturesco- para divertir a la audiencia. Desde un principio se anuncia que algo puede salir mal, pero cada minuto sucede lo inesperado; el daño, el error, la falta de atención que genera esa risa liberadora. Incluso el simple malentendido y los lazos entre los diferentes personajes son una fuente de hilaridad. Un pequeño juego de palabras en francés no se puede replicar, ya sea en inglés o en español, pero, para superar esta dificultad, nos encontramos con una buena interpretación de todo el elenco capaz de imitar el ritmo y jugando en todo momento con las expresiones faciales y con el cuerpo. Nakache y Toledano recurren a la repetición para realzar las personalidades y las bromas, no son reacios a permitir que los pequeños detalles del fondo se vuelvan relevantes más adelante, y realmente dejan que Bacri soporte el peso de su difícil tarea. El director de fotografía David Chizallet recorre todos los pasillos, habitaciones, cocinas y el jardín del recinto principal para que el espectador sea testigo de los incidentes a medida que ocurren. Están sucediendo tantas cosas que Nakache y Toledano son capaces de armar astutamente bromas de tal manera que apenas las notamos, de modo que cuando tienen repercusiones, su impacto es mayor.
Fecha de estreno en México: 19 de enero, 2018.